jueves, junio 01, 2006

Revolución pingüina

Es increíble la cantidad de acontecimientos ocurridos en el último tiempo.
Hace tiempo que necesitamos cambios en un sector que es vital para la patria. Un país sin educación o con una formación débil no tiene derecho a nada, ni siquiera a las buenas intenciones. El movimiento estudiantil ha servido,por una parte, para destapar la crisis que vive la educación pública, particular subvencionada y sobre todo la municipal, donde los resultados son, obviamente el reflejo de la brecha socieconómica y cultural que existe en Chile entre los sectores depositarios de los beneficios del sistema económico imperante.Esto resulta paradójico en la especial situación que atraviesa el país, tras 16 años de gobiernos democráticos de centro izquierda, administradores de una bonanza económica que ni los más optimistas esperaban.
Con todo, lo más relevante de este movimiento es la aparición de una juventud de pingüinos que se ha informado, ha sido agente de pensamiento crítico y , lo más importatnte, ha sido gestora de un clima de reflexión nacional sobre lo que tenemos ahora y a lo que es posible aspirar
Otro punto a destacar es la creciente necesidad en los adolescentes de conocer e informarse en los en torno a temas tan complejos como leyes orgánicas, agendas de país y aspiraciones que, en algunos casos rayan en lo utópico. Parece que los estábamos subestimando.
Ante este espectáculo no me queda más que sacarme el sombrero frente a los escolares de Chile, como un acto de apoyo.